la sirena suena lejos de la libertad
la comodidad esclava
clava sus garras en el obsoleto cuerpo lleno de códigos.
El obrero lleva a cuestas el féretro salario
de la cría creadora de esperanzas
que paga la fianza de los créditos robados y sueños prestados.
Al llegar la fría noche con el tenebroso tiempo
recoge sus manos, levanta la vista
y entierra su cabeza en favor de la espléndida mediocridad.
Martin Gala
No hay comentarios:
Publicar un comentario